Wednesday, September 20, 2006

Un minusvalido suicida en la A-92(Si, Granada)

Un minusválido siembra la alarma entre decenas de conductores al ir en silla de ruedas por la A-92

La Guardia Civil usó un helicóptero para interceptar al suicida, que sufre un trastorno mental




Un minusválido en silla de ruedas sembró el pánico entre las seis y media y las siete de la tarde del pasado lunes entre los conductores de turismos y camiones que se encontraban en los carriles de la A-92, sentido a Granada. El disminuido circuló, al menos durante cinco kilómetros, desde el cruce de Chauchina hasta el kilométrico 232 de la citada autovía donde fue interceptado, con su silla de ruedas y a cuanta velocidad podía por el carril derecho en sentido a Granada. Se da la circunstancia de que no existe arcén alguno en la práctica totalidad del recorrido, por lo que puso en peligro su vida y la integridad física de los conductores que pasaban a su lado. Turismos y camiones tuvieron que esquivarlo, con el consiguiente riesgo al darse una gran afluencia de vehículos.

La Guardia Civil recibió una auténtica avalancha de llamadas de conductores alarmados, por lo que la central alertó al helicóptero de la Benemérita para que lo localizara. Además fueron avisadas dos patrullas, de Atarfe y Santa Fe, al ser las más próximas.

Fuerte resistencia

Los cuatro agentes que lograron interceptarlo tuvieron que retenerlo en varias ocasiones. Se aferraba a su silla de ruedas porque insistía en seguir su camino por el carril derecho de la autovía. Los agentes le pidieron su documento de identidad, a lo que indicó que no tenía papel alguno, pero que se llamaba Ignacio Gurruticoechea Fernández, de 54 años. Entre sus testimonios de justificación a los agentes, aseguró que había recorrido toda España en su silla de ruedas y que era descendiente del Duque de Ahumada. Con tales afirmaciones, los guardias civiles de Atarfe y Santa Fe optaron por avisar a los servicios médicos, que lo trasladaron a la sección de psiquiatría del Hospital Virgen de las Nieves. Según pudo averiguar ayer IDEAL, el mismo disminuido protagonizó dos escenas similares en dos carreteras secundarias.

1 comment:

Anonymous said...

La verdad, la gente es cada día más rara... Para suicidarse, bastan unas botellas de vodka y unas cajas de pastillas. Y se puede hacer cómodamente en casa.
¿Seguro que lo que quería era suicidarse? El duque de Ahumada fue el fundador de la benemérita Guardia Civil. Si ese pobre hombre pensaba que era su descendiente, a lo mejor creía que podía circular como le diera la gana sin que le multaran.