P1 en su número 378 de Abril de 2005 dijo.....

Un hombre despierta en medio de la jungla. Está herido y confundido. Desorientado, corre sin rumbo hacia Dios-sabe-dónde, hasta llegar a una playa desierta donde se escuchan gritos y llantos. El escenario no puede ser más caótico y aterrador: muertos y heridos, gente en estado de shock andando entre los resto del fuselaje de un avión todavía en llamas, turbinas en marcha absorbiendo y despedazando pasajeros... Jack será uno de los cuarenta y ocho supervivientes del vuelo, perdidos en una isla que nadie parece ubicar en los mapas y que parece albergar en su interior algo que se mueve por la selva, derribando palmeras y emitiendo unos escalofriantes gruñidos. No. No se trata de un híbrido bizarro entre "Survivor" y "Jurassic Park". Simplemente, así es como comienza "Lost", la última gran sensación de la cadena americana ABC. Con uno de los arranques más espectaculares y absorbentes que haya tenido jamás un drama televisivo, "Lost" se ha ganado, por méritos propios, un lugar destacado en el Olimpo de las series de culto de los últimos años.
Creada por J.J.Abrams ("Alias", 'Felicity"), perro viejo en esto de las adicciones catódicas -todo un Rey Midas del género-. y grabada en Hawai, "Lost" ha supuesto toda una sorpresa en la parrilla televisiva norteamericana, consiguiendo espectaculares audiencias (su episodiespectadores) y alargando a veintidós sus doce episodios iniciales, con vistas a proseguir tres o cuarto temporadas más un proyecto que originalmente iba a resumirse en una (esperemos que mantenga el nivel, que por el momento es muy alto...). Pero, datos estadísticos aparte y entrando dónde realmente nos interesa, si por algo sorprende una serie como "Lost" es por su trepidante propuesta, sus interesantes protagonistas y sus incesantes giros argumentales, dignos del guionista más retorcido, que redefinen constantemente cualquier intento de teoría racional al respecto. Actualmente en la recta final de su primera temporada, la serie es un imparable crescendo de situaciones límite, cada vez más enrevesadas y poco clarificadoras. No entraremos a desvelar nada en particular, porque todos odiamos los spoilers a traición, salvo el hecho de que un envoltorio tan atractivo como el que presenta la prime timer "Lost", aún gozando con unos efectos especiales y un contexto de acción/aventura realmente impactantes, no sería nada sin las interpretaciones de sus protagonistas. A través de ellos, de sus miedos y sus secretos, pasamos de un mero ejercicio de supervivencia in extremis a uno de convivencia sin precedentes, configurando una serie de 'aventuras de situación' llena de momentos francamente memorables. A partir de la interacción de sus protagonistas (catorce son los destacados, junto a secundarios igualmente decisivos) en un lugar perdido de la mano de Dios, y rodeados de amenazas y misterios, los supervivientes extraviados acabarán por encontrarse a sí mismos aun-
que no a través de un camino de rosas.
Pulgares arriba para personajes como Jack (Matthew Fox), prototípico Héroe (con mayúsculas, por razones evidentes) de la serie; la preciosa outlaw Kate (Evangeline Lilly), Charlie (rockstar venido a menos encamado por el hobbit Dominic Monaghan), el redneck resentido Sawyer (Josh Holloway), el simpático Hurley (Jorge García) y, especialmente, el enigmático Locke (Terry O'Quinn), figura clave en los acontecimientos que se irán sucediendo. Abarrotada de highlights (demasiados para extenderse en enumerarlos aquí), y con una lectura para nada lineal que hilvana un misterio tras otro, "Lost" es una de esas series que no te abandona una vez ha terminado el episodio. A medida que avanza, su resolución parece cada vez más y más complicada, hasta el punto de parecer una gigantesca broma con licencias religiosas y/o kármicas lo cual no es ningún problema, sinceramente, a no ser que estire como chicle una historia que debería mantener ciertos límites pueda llegar a lo insustancial. Afortunadamente, a punto de finalizar su primera temporada, la sensación es realmente positiva. Una de las series más sobresalientes, adictivas y coloristas de los últimos años, donde perfectos desconocidos deben cooperar para sobrevivir en un marco inhóspito e incluso el líder más beatífico guarda inconfesables secretos, dolorosos de revelar. Todos aquellos que no hayáis oído hablar antes de "LosV ya podéis empezar a moveros; y los que ya seáis adictos a la sede de J.J.Abrams... bueno, ya sabéis: ¡se admiten apuestas!

Alberto Díez